viernes, 10 de septiembre de 2010

Como una leyenda, pero realidad (Dedicado)

Sólo miré tus ojos
y sentí como los míos se cerraban
desviándolos a una mundo diferente,
sensación de amor inexplicable,
tan fuerte que lloraba en mi mente,
chorreando lágrimas dirigidas a mi corazón,
y, un susurro que podía decir,
te quiero,
algo tan intenso como cuando te escuchaba,
silencioso y atento,
mi mano sobre la tuya, trenzadas.
La voz, sí, la voz ya no existía casi,
carcomida por el silencio,
majestuoso en nuestros labios aferrados.
Sólo intenso, te amaba,
sintiendo ese sudor pegado a mi pecho,
estando yo sobre ti,
sentir tu aliento rozar mi oído,
mi lengua por tu fino cuello hacia tu boca
esperando angustiada por el amor,
movimientos bruscos
creados por la presión de amar tanto,
mi mano rozando tu cuerpo buscando la tuya
para apresarla.
Nunca amé tanto a alguien, alguien así,
que me comprendiera,
que me hiciera sentir algo principal en la vida,
sintiendo ahora que lo único importante que existe en mí,
eres tú.
Te amo.

hbt - 10/02/94 - 1:30am

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